LA VIVIENDA COMO ARMA DE CONSTRUCCIÓN MASIVA - Artículo de los miércoles

LA VIVIENDA COMO ARMA DE CONSTRUCCIÓN MASIVA 

Autor: Alejandro López / Director General del MUSARQ





La Gran Misión Vivienda Venezuela (GMVV) ha sido una estrategia detonante
para desencadenar procesos sociales, económicos y urbanos del país.


El mayor impacto ha sido especialmente en la atención de un relevante número
de familias sin casa o que vivían en zonas de alto riesgo estructural o ambientales.
También ha incidido en promover y consolidar la organización comunal, la
producción nacional de materiales y componentes y la transformación de áreas
urbanas o aledañas, con nuevos conjuntos residenciales y sus equipamientos o
con las previsiones para dotarlos en un futuro.

Desde el 30 de abril de 2011 hasta esta fecha se han construido alrededor de
cinco millones de viviendas, según cifras oficiales. Lo que se podría calificar como
una segunda etapa, para el año 2030, se propone una meta de tres millones.
Lo cual sería una oportunidad magnífica para impactar con contundencia y con
visión estratégica e integralmente a sectores claves para el desarrollo como son
los siguientes: la industrialización de la construcción con todos sus efectos en
su racionalización y “venezolanización”, en la diversificación, simplificación y
normalización de componentes y sistemas constructivos existentes e
innovadores (al alcance de mano de obra poco especializada), en la investigación
y desarrollo de los procesos de diseño, gerencia, construcción y
mantenimiento en la producción autogestionaria de viviendas, equipamientos y
servicios, en la organización y formación de comunidades, técnicos,
estudiantes y profesionales en las disciplinas vinculadas con la arquitectura y las
ingenierías, entre otros.

La construcción es un factor esencial para estimular la economía, el empleo, la
industrialización, la equidad en la dotación de viviendas, equipamientos y servicios
en el territorio, lo cual redunda en seguridad y soberanía particularmente cuando
se trata de las fronteras, en la articulación y capacitación comunitaria, y mucho
más.

Finalmente, tenemos un desafío fabuloso en los próximos años, con la
producción de viviendas populares, que amerita ampliar y repensar la visión y los
enfoques actuales, incorporar las experiencias y conocimientos adquiridos
incluyendo a las universidades y profesionales, para imprimirle a esta nueva etapa
de la GMVV una capacidad superior de transformación del avance del país.

En próximos artículos, trataremos en detalles, propuestas para este
entusiasmante reto para optimizar las condiciones de vida de la población y
para el progreso social, económico, territorial, industrial, ambiental de la nación.

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